LA SOLEDAD DEL QUE CRECE





Cuando empece a actuar en consecuencia con lo que me daba cuenta, por momentos me sentia sola. No era que mis amigos queridos y algunas personas de mi familia me abandonasen, Era que yo los estaba viendo desde una nueva perspectiva. Y a pesar del miedo que esa distancia me provocaba, no estaba dispuesta a renunciar una pizca del cambio. El camino del crecimiento personal que muchas personas eligen emprender es siempre una opcion. La eleccion de este caminoque consiste en estar permanentemente en estado de proceso y transformación, tiene un punto de partida. Algunos lo descubren durante alguna terapia, en el encuentro con algun ser especial que se cnvirtio en personaje inolvidable, practicando un deporte fuerte o yaga, o a traves de una experiencia de conciencia no habitual. O simplemente en el hastio y el aburrimiento.
Para otros es una crisis existencial: el miedo a lo que todavía noconocemos y a lo que vendra. Un dia comprobamos que aquel argumento que elegimos para vivir hace mucho tiempo nos esta quedando estrecho: la estructura en la cual nos habiamos instalado ahora nos resulta limitada.
El proceso de crecer tiene algo de un SALTO en el vacio, algo de un viaje al abismo. No hay garantias ni tampoco hay llegada. A medida que nos alejamos del punto de partida, no acercamos a un punto de no-retorno. El estilo de vida que dejamos atrás, incluyendo metas, valore, actividades, compañias, etc., no nos resulto convincente y aun no hemos encontrado otro estilo de vida netamente distinto que refleje nuestra manera de sentir hoy. Es el momento del impasse. Algo, sin embargo, nos hace seguir en un camio que recorremos con ojos vendados…
En alerta permanente y con conciencia despierta, me aflorarn sentimientos que nunca admiti. De repente, no sentimos mas deseos de impedir que se manifiesten. Con gran curiosidad advertimos que nos pasa. No tengo mas que fingir, no tengo mas modelo de mi, ni de la que “debo ser”.
Los dividendos de esta nueva ampliación de la conciencia se dejan ver: me sorprende la cantidad de energia de que ahora dispongo. Durante años la bloqueaba al suprimir emociones para no admitir el dolor. Hoy puedo encontrarme con lo que me pasa porque tomo el compromiso de mirar hacia adentro “sin modelos de mi misma”…
Con el tiempo aprendemos que ninguna actitud pasiva de entregarnos a “alguien” para que nos “arregle” funciona. Nadie puede llevarme a ninguna parte sino yo misma. Desarticulo toda suerte de mitos como creer que aprendiendo a descargar emociones tengo curado todo. Para interrumpir conductas repetitivas que no me servian debi aprender a integrar descarga emocional con comprensión racional de mis reacciones.
Ninguna tecnica puede reemplazar el recorrido interior que cada persona debe emprender. Si nos “empujamos” hacia un ideal, un modelo preciso de cómo expresarnos emocionalmente, incorporamos otro “debe ser” igual al que abandonamos al iniciar el proceso. Cada crecimiento es una búsqueda individual.  Crecer consiste en aprender a armonizar y transformar los diversos aspectos internos y externos de nuestro Ser en un delicado equilibrio cambiante con el que nos movemos hacia nuevos descubrimientos. Es este el gran desafio al estancamiento, a la inercia y es el continuo fluir de la transformación…

Del libro:"Gestalt Personal. Un viaje hacia la unidad"
Nota de Marcela Miguens

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